Chantal Sébire solicito ayuda para morir dignamente... pero se la negaron, la hipocresía de la sociedad la condeno a seguir viviendo.
Chantal Sébire ya descansa en paz... anoche murió en su casa, quizás fuerte natural, quizás eutanasia.
No es la primera persona que necesita ayuda de una mano amiga para acabar con su vida, algo que el resto de nosotros podemos hacer fácilmente, para ellos es imposible.
Una vez dije a alguien que no querría vivir para siempre, al principio le sorprendió pero después se dio cuenta que no tendría ningún sentido vivir para siempre... y es que cuando nos hablan de muerte la primera reacción que tenemos es el miedo, la inquietud... pero la muerte, esta presente en nuestras vidas y debemos empezar a aprender a convivir con ella, incluso a entender a quienes no quieren seguir viviendo en determinadas condiciones.
La eutanasia sigue estando presente y aunque nadie se atreva a legislarla no significa que no exista. La realidad no se puede esconder.
Tags: francia, eutansia, hipocresia, sébire