Seguramente que ya habremos hablado de este señor en el blog... Se negó a una adopción, haciendo caso omiso a la legislación y confiando únicamente en lo que vociferan los obispos por las calles...
Pues como es normal a este buen hombre, le inhabilitaron para ser juez, puesto que si se va a saltar a la torera las leyes, pues no puede ser juez... y le inhabilitaron por dos años, pero recurrió al
Tribunal Supremo y
este en vez de bajarle la pena la ha subido a diez años.
Espero que se le quite, a este y otros, las ganas de meterse hacer política desde su sillones y se limiten a hacer aplicar las leyes, con independencia de sus creencias religiosas, que aúnque son válidas, son suyas.
Tags: calamita, supremo, adopción, gays